sábado, 12 de septiembre de 2009

Muere lentamente

Muere lentamente quien no viaja,
quien no lee,
quien no oye música,
quien no encuentra gracia en sí mismo.
Muere lentamente
quien destruye su amor propio,
quien no se deja ayudar.
Muere lentamente
quien se transforma en esclavo del hábito
repitiendo todos los días los mismos
trayectos,
quien no cambia de marca,
no se atreve a cambiar el color de su
vestimenta
o bien no conversa con quien no
conoce.
Muere lentamente
quien evita una pasión y su remolino
de emociones,
justamente estas que regresan el brillo
a los ojos y restauran los corazones
destrozados.
Muere lentamente
quien no gira el volante cuando esta infeliz
con su trabajo, o su amor,
quien no arriesga lo cierto ni lo incierto para ir
detrás de un sueño
quien no se permite, ni siquiera una vez en su vida,
huir de los consejos sensatos...
¡Vive hoy!
¡Arriesga hoy!
¡Hazlo hoy!
¡No te dejes morir lentamente!
¡NO TE IMPIDAS SER FELIZ!

Despiertame

Despiertame
Que no te importe en lo absoluto
Si mi sueño es profundo
Que mi único sueño
Es tenerte junto a mí.
DespiertameCon tus suaves caricias,
Deslizando tus manos sobre mi rostro
Y que cada segundo sea una eternidad
Y que cada segundo lo viva a tu lado.
Despiertame
Dejame sentir tu palpitar
Dejame abrazarte como nunca
Dejame quererte hoy, mañana y siempre
Dejame hacerte feliz.
Despiertame a besos
Despiertame con tu voz
Despiertame con una sonrisa
Despiertame del todo
Despiertame de esta locura.
Despiertame...
Cuando sea la hora de mirar tus ojos
Cuando sea la hora de quedarme contigo para siempre
Di que este es solo un sueño
Y que tú serás mi única realidad
Despiertame...
Que ha pasado tanto tiempo sin verte
Que muero por tenerte
Mi paciencia ha llegado a su límite
Y lo único que quiero es verte una vez más.
Despiertame
Que seria la mejor forma de despertar
Seria la mejor forma de iniciar mi día
Que sin ti mi vida no es igual....tan solo despiertame corazon,que te extraño demasiado!

Qué pobres somos

Una vez, un padre de una familia llevo a su hijo a un viaje por el campo con el firme propósito de que su hijo viera que tan pobres eran las gentes del campo. Estuvieron por un día y una noche completos en una granja de una familia campesina muy humilde. Al concluir el viaje, y de regreso a casa, el padre le pregunta a su hijo,
-Qué te parecio el viaje?
-Muy bonito Papá!
-Viste que tan pobre puede ser la gente?
-Si! -Y qué aprendiste?
-Ví que nosotros tenemos un perro en casa, ellos tienen cuatro. Nosotros tenemos una alberca que llega de una barda a la mitad del jardin, ellos tienen un arroyo que no tiene fin. Nosotros tenemos unas lámparas importadas en el patio, ellos tienen las estrellas. Nuestro patio llega hasta la barda de la casa, ellos tienen todo un inmenso campo como patio.
Al terminar el relato del niño, el padre se quedó mudo....y su hijo agregó: -Gracias Papá por enseñarme lo pobre que somos!
P.D. Hay tantas cosas a nuestro alrededor que llegan a ser invisibles a nuestra vista. Aprendamos a apreciar tantas bellas cosas que tenemos a nuestro lado y vivir aferrados a ellas.

La rosa y el sapo

Había una vez una rosa roja muy bella, se sentía de maravilla al saber que era la rosa mas bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que la gente la veía de lejos. Se dio cuenta de que al lado de ella siempre había un sapo grande y oscuro, y que era por eso que nadie se acercaba a verla de cerca. Indignada ante lo descubierto le ordenó al sapo que se fuera de inmediato; el sapo muy obediente dijo: Está bien, si así lo quieres.
Poco tiempo después el sapo pasó por donde estaba la rosa y se sorprendió al ver la rosa totalmente marchita, sin hojas y sin pétalos. Le dijo entonces:
Vaya que te ves mal. ¿Qué te pasó?
La rosa contestó: Es que desde que te fuiste las hormigas me han comido día a día, y nunca pude volver a ser igual.
El sapo solo contestó: Pues claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre eras la mas bella del jardín.
Moraleja:Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos mas que ellos,mas bellos o simplemente que no nos "sirven" para nada. Dios no hace a nadie para que esté sobrando en este mundo, todos tenemos algo que aprender de los demás o algo que enseñar, y nadie debe despreciar a nadie. No vaya a ser que esa persona nos haga un bien del cual ni siquiera estemos conscientes.

sábado, 14 de junio de 2008

Negro sobre blanco, blanco sobre negro.




El blanco de color marfil en las teclas de un piano,necesita el negro ébano del resto de teclas para,por ejemplo,matizar el glissando (efecto sonoro consistente en pasar rápidamente de un sonido a otro haciendo oír todos los sonidos intermedios posibles, no sólo los tonos y semitonos)Estaba sólo ante el tablero de ajedrez,fue él mismo,el rey,quien lo mandó construir,pero nada más que con casillas blancas y figuras blancas.A los pocos días,viendo la evolución de los acontecimientos,encargó al mejor artesano un nuevo tablero,esta vez de casillas blancas y negras,lo mismo las figuras...no quería sentarse ni sentirse, de nuevo, sólo frente al tablero de ajedrez.Son grandes y suaves,comen bambú y,aunque puedan tener un día triste,sus ojos tienen la magia de reflejar la sonrisa de un niño.Ellos quedan extasiados mirando a los osos panda,quizá los niños piensen que la naturaleza no pudo haber elegido mejores galas para el osito panda...un simpático traje,como no,negro sobre blanco...o blanco sobre negro,que más da.Me gusta contemplar un cielo inundado de millones de estrellas,luminosas,blancas,brillantes...cuanto más oscuro y negro es el manto del cielo nocturno,más radiante y luminosa nos guía la Osa Mayor,incluso puede que en compañía de Cassiopea...y aunque algunas estrellas muestren su timidez pasando fugazmente ante nuestros ojos,la oscuridad nos permitirá contemplar por unos instantes,eso mismo...la fugacidad de lo brillante...Es curioso,en ese manto denso y negro que cubre el cielo de la noche,al cual nuestro cerebro,como ya mencioné hace tiempo,ha decidido situar como fondo,caben miles de millones de destellos blancos,agujeros negros que engullen polvo de estrellas y galaxias enteras,años luz que viajan solitarios y,paradójicamente, eternamente perdidos en el tiempo oscuro del universo.Ese manto de negra oscuridad arropa todos los mundos imaginables.Si el cielo nocturno fuese blanco...nadie hubiese tenido la posibilidad y el acierto de llamar Andrómeda a una estrella.De la misma forma,si en cielo negro de la noche,las estrellas fuesen negras,nunca se hubiesen escrito algunos de los poemas más bellos.De nuevo han de caminar juntos,blanco y negro,negro y blanco.Contemplad el alba al amanecer,porque ha querido hermanar lo negro y lo blanco.El alba,cuando está a punto de nacer un nuevo día,nos obsequia con una de las alianzas más hermosas de la naturaleza,la oscuridad de la noche,abraza por unos minutos la incipiente,y aún tenue,blancura del amanecer.En ese momento de claroscuros barrocos,nada es totalmente negro,ni nada totalmente blanco...eso es lo que tienen los abrazos,por unos momentos,dos...se sienten uno solo.El día,finalmente,pasa su testigo a la noche que nos custodia.Vencido por el sueño, mis ojos van cerrándose despacio,el negro y el blanco se van fundiendo poco a poco,caminan por la cuerda de un funambulista,colocada justo en la línea que divide lo consciente de lo inconsciente,van desapareciendo de mi vista,hasta diluirse en la distancia que separa lo que ya no es tan blanco de lo que aún no es tan negro.Los últimos rayos del sol,juegan al escondite con las primeras sombras de la noche.Me voy alejando de un mundo para introducirme en otro...en este éxodo ya no hay blancos ni negros...la diáspora terrenal tiene vetada su entrada en el escenario onírico,aquí solo hay sueños,que quizás se pierdan para siempre en agujeros negros...o viajen indefinidamente en el tiempo a través de años luz...
En cualquier caso,los sueños siempre han sido libres, no pertenecen a lo blanco ni a lo negro,más bien al contrario,son unos y otros los que viajan fugaces dentro de un mismo sueño.

El Árbol de Navidad más triste del mundo.


Un grupo de niños baja en tropel las escaleras mecánicas del centro comercial,la algarabía muchachil es ensordecedora.Provenían de alguna de las siete salas de cine ubicadas en la planta superior.Hoy estrenaban una de esas películas del género fantástico tan propias de estas fechas navideñas,y en las que desfilan toda suerte de extrañas criaturas...ya se sabe,brujas buenas y malas,elfos,un enorme oso polar que habla,algún ser mitológico que otro,un anciano con bastón volador y, por supuesto, unos jovencitos encantadores a través de cuyos ojos logramos adentrarnos en ese mundo de ensueño.Los muchachos excitados,embriagados por el viaje al mundo de nunca jamás que soñaron desde sus butacas,pasan como una estrella fugaz, casi rozando,un arbolito de Navidad situado en un pequeño rincón del enorme centro comercial,en la desolada planta del sótano,allá abajo.Sus bolitas rojas y doradas sin centelleos luminosos sienten frío ante la desnudez de unas paredes grises y húmedas.Aun retumba el eco de las voces infantiles tras su paso veloz.Una bolsa con gominolas, regaliz rojo y cocacolas de azúcar yace inmóvil junto al árbol navideño,no lejos de ahí, un chiquillo detiene por unos instantes su frenética carrera,parece bacilante,duda unos segundos...finalmente opta por la seguridad del grupo y abandona su pequeño botín azucarado.Será que la idea de retroceder en solitario pesa más que la tentación de satisfacer su paladar.El silencio vuelve a invadir esta planta oscura y se convierte,una vez más,en el único compañero del arbolito.En lo alto de su copa descansa una estrella dorada,es pequeñita y tímida,como todo lo demás, sin luz,igual que el resto de bolitas.La estrella parece mirar hacia arriba guiada por un débil hilillo luminoso que proviene de la primera planta.Ahí las luces se multiplican por doquier,todo es vida, bullicio.Todo es un anuncio de publicidad.Un novio discute con su novia,ésta parece ensimismada degustando una tarrina de chocolate belga y observa,con cierta indiferencia, a su pareja.Una abuela canta, desafinando, un villancico a su nieta,la pequeña ríe, quizás le recuerde a algún dibujo animado...o vete a saber de que reirá.Si,arriba cientos de zapatos de todas las razas posibles deambulan sin rumbo definido,en caótica procesión,están pendientes de no chocar,nunca se detienen.Cuatro chicas adolescentes con rostro aburrido y curiosas zapatillas de cuadritos multicolores, esperan turno para entrar en los cuartos de baño.Unos jovencillos con gorra beisbolera acaban de estallar un globo blanco con dibujitos de Papá Noel y ríen de forma estruendosa.Una mujer con bebé en brazos observa la escena,tiene cara de pocos amigos,su mirada gélida y amenazante atraviesa a los desbocados imberbes,sus estridentes risotadas se congelan de inmediato,saben que no hay rival más poderoso sobre la tierra que una mamá leona protegiendo a su cachorro.Mejor poner pies en polvorosa.Dos simpáticos hermanitos,unos 7 años el mayor,4 o 5 el pequeño, hacen acto de presencia.Ambos ,idénticamente uniformados,exhiben sin conocimiento de causa exclusiva ropa de marca.Estos infantes, a su vez,son exhibidos por sus jóvenes y triunfadores progenitores,ellos si,con conocimiento de causa.Finalmente, en este alarde exhibicionista,la mega-marca muestra triunfal el peregrinar de sus fieles acólitos por la catedral del ocio.Un guardia de seguridad con sonrisa cansada y rasgos andinos,está postrado junto a una de las puertas de acceso al centro comercial,trata de hacer prisioneras las miradas sin nombre de los miles de visitantes,solo busca algún saludo y,tal vez, una mirada cómplice sobre tacones de aguja y perfumada con Chanel nº 5 que le haga soñar,también a él,con un mundo de nunca jamás.Soñar es gratis.Su chaqueta de uniforme,fabricada al por mayor,le queda dos tallas grande,es de color gris marengo con unas ridículas franjas verdes.Desafortunada combinación para seducir.El guardia se resigna,a penas recibe un par de saludos en este descomunal trasiego de gente sin ojos.En la planta del sótano,el frío,la oscuridad y el silencio han secuestrado a la Navidad.El arbolito,rehén solitario,permanece triste y callado en su rincón.Son las doce de la noche.El centro comercial está casi desierto.En la primera planta hay restos de lo que fue un globo blanco,una vieja chaqueta de pana marrón,un gorrito azul de lana,cientos de golosinas alfombrando el suelo y miles de sueños huérfanos vagando como fantasmas.Dos limpiadoras fuman sendos cigarrillos,no parecen inmutarse ante la visión del escalofriante campo de batalla.Estas espartanas están acostumbradas al combate cuerpo a cuerpo.Son dos guerreras de la vida.Alguien baja las escaleras mecánicas y accede al sótano,se dirige con paso lento hacia un rincón frío y escondido.Conecta un cablecito negro y fino.De repente las bolitas rojas y doradas del pequeño árbol lucen en la oscuridad del sombrío lugar...el rostro iluminado del guardia deja escapar una sonrisa melancólica teñida de rojo y oro.Pronuncia unas palabras,el tono es suave:"Hola amiguito,creo que eres el árbol de Navidad más triste del mundo""¿Sábes una cosa compañero? ¡al carajo si nadie me saluda! Me complace estar contigo,tú me escuchas".El guardia se sienta junto al calor de las bolitas, abre una bolsa de plástico y come algo de turrón.Después de permanecer unos minutos en silencio,se levanta con gesto fatigado y frota con el puño de su chaqueta la estrella dorada del arbolito,lo hace despacio,con ternura."Feliz Navidad amigo",concluye.La estrellita dorada brilla más que nunca.

Toda una vida . . .


Toda una vida...

Al atardecer los últimos rayos de sol yacen sin fuerzas sobre el agua verdosa del pantano.Una libélula parece deleitarse con el zumbido de su cuerpo sobre el agua,creando ondas concéntricas de perfecta geometría.El movimiento acompasado de los anillos se revela contra la quietud del entorno.La mayoría de las larvas acuáticas permanecen ajenas a esta ilusión óptica que distorsiona visualmente la realidad.Una ninfa impaciente se abre paso entre la flora acuífera.Es el momento que ha elegido Huldra (así la llamaré) para abrazarse por vez primera a la vida exterior,bate impetuosa sus alas transparentes al viento,éste sabe que,luego de unas horas, no se las volverá a mecer nunca más.Nadie mejor que el viento percibe la finitud del instante, de la existencia misma. Huldra morirá al día siguiente,antes de que el sol se despida,nuevamente,del pantano.Huldra es una Ephemeroptera,en este caso una mariposa efímera,su ciclo vital una vez fuera de la crisálida es menos de 24 horas.En ese intervalo ha de reconocer a sus depredadores,el aire,la luz del sol,volar con todas sus fuerzas,esperar a su pareja y,si él cumplió con las expectativas, realizar la cópula.Luego,sin tiempo para ser madre,ofrecerá una nueva vida al sol.Una vida a cambio de otra.Ese es el trato.Su compañero sentirá la libertad del viento solo unas horas más.Mañana por la tarde,antes de un nuevo ritual amoroso,sus alas de gasa habrán dejado de moverse.Toda una vida para un único propósito,nada más...y nada menos.No muy lejos de ahi,Balder (así lo llamaré a él) refleja en su frenético aleteo la percepción única de su propio destino.Va al encuentro de su compañera,Huldra lo espera,quiere que la seduzcan.Nadie,ni aun a punto de marchitarse,se entrega así como así.Creo que Balder lo conseguirá...ha empeñado su vida a tal causa.No en vano fundirse ambos hasta que sus fluidos se derramen por un solo cauce es la primera y última razón que los alienta.En unas pocas horas habrán de exprimir el jugo de toda una vida.La naturaleza les ahorró su aparato digestivo,ni siquiera hay tiempo para comer,ni para otra cosa que no sea un fugaz encuentro de dos enamorados adolescentes,mañana serán viejos y habrán abandonado este mundo.Nunca antes habían sentido el aire deslizarse por sus diminutos cuerpos.Cuando se unan estarán listos para morir.Sus vástagos serán las nuevas ninfas acuáticas del pantano.Ahí,dentro de sus crisálidas,ya han comenzado a vivir,permanecerán latentes durante meses,aguardan deseosos,entre las algas, la llamada del viento.Saben que la verdadera vida comenzará cuando sientan la brisa fresca sobre sus alas.Que sensación tan plena de libertad...con los últimos rayos del sol,cuando alzen el vuelo,primero bacilante,después vigoroso y libre hacia el primer y último abrazo de sus vidas.